Cómo hacer churros sin tener la churrera y… ¡súper fáciles!
El verano se presta para comer cosas ricas y son muchos los que eligen las playas de la Costa para disfrutar a pleno de un merecido descanso. Bien temprano a la mañana y cuando empieza a caer la tarde, la arena se llena de vendedores que, canasta entre los brazos, pasan caminando entre las sombrillas y reposeras al grito de “hay churrrro”.
Si bien una opción es comprarlos, una mucho más económica es hacerlos en casa. Y lo que es mejor, no se necesita tener la churrera. A continuación te contamos una receta casera súper sencilla.
Para los churros vamos a necesitar 1 taza de leche, 1 taza de agua, 1 trozo de manteca, 1 cucharada de sal, 1 cucharada de azúcar, 2 tazas de harina leudante, grasa para freír y azúcar para rebozar. Además se puede agregar un chorrito vainilla, sólo para darles un poco más de gusto.
Paso a paso
* Mezclar la sal, el azúcar y las tazas de harina leudante.
* Colocar en una olla el agua y la leche más el trocito de manteca, y dejar hervir.
* Una vez que hirvió agregar de golpe la mezcla de harina, sal y azúcar, y revolver hasta que se cocine. Nos damos cuenta que está lista porque se tiene que despegar de la olla y tener una textura homogénea.
* Volcar la masa a la mesa y amasar con cuidado porque está caliente. Tiene que quedar muy lisa.
* A falta de churrera, hacer rollitos no muy gruesos y cortarlos de forma pareja, para que queden todos iguales (esa cantidad de masa debe rendir unas 30 unidades). Con un tenedor se los puede rayar para que tengan la forma de los que se venden en la playa, aunque lisos quedan muy ricos igual.
* Poner a calentar la grasa y freír de a tandas. Cuando se doren, retirarlos del fuego con una espumadera y dejarlos que absorban la grasa en papel absorbente.
* Robozarlos con con azúcar molida y… ¡a disfrutarlos! Como rellenarlos sería muy complicado, se le puede echar dulce de leche por encima y luego espolvorearlos con azúcar.